"Agregar una pizca de Sal de Añana a un plato es un placer mayúsculo. Incorporas parte de la memoria de un pueblo, un pedazo de su naturaleza solidificada y una fracción de la biografía de un valle ligado a una actividad artesana"
Andoni Luis Aduriz (Donostia, 1971) es, sin lugar a dudas, uno de los chefs más influyentes de nuestro tiempo.
Este reconocido cocinero ha apostado siempre por la evolución y la interdisciplinariedad en la cocina, y ello le ha llevado a atravesar las fronteras de lo establecido, a ser un rebelde tras los fogones. Su objetivo es seducir mediante una experiencia que abarque todos los sentidos.
Aduriz cursó sus primeros estudios de cocina en la Escuela de Hostelería de Donostia, donde empezó a expresarse a través de sabores y texturas. Fue entonces cuando Aduriz comenzó a cultivar su amor por la Nueva Cocina Vasca y por los productos de la tierra.
En 1998 cuando comenzó su apuesta más arriesgada y satisfactoria: abordó en solitario el proyecto de Mugaritz, que desde el año 2006 cuenta con dos Estrellas Michelin. Mugaritz se ha convertido en sinónimo de I+D, y allá la palabra restaurante está desterrada. "Es algo más", tal y como el propio Aduriz reconoce. La transgresión en los fogones ha llevado a su restaurante a cosechar innumerables éxitos: desde el año 2006 se mantiene entre los diez primeros restaurantes del mundo según la revista Restaurant.
Aduriz fue el encargado de clausurar la Cosecha de Sal en 2011. “Las emociones o factores subjetivos como la cultura, la trazabilidad o el valor que se le da a la dedicación de los artesanos, se han sumads al tacto, al gusto y al aroma. En esta nueva realidad gastronómica se sitúa la sal de Añana, que siendo una simple estructura de cloruro sódico acoge en su corazón cristalino toda una historia que se remonta a miles de años atrás", explicó.